El nuevo siglo aporta luz y reflexión sobre el uso de las sujeciones. Tanto los pacientes como los profesionales y los familiares hacen lectura de estas prácticas desde la vertiente de la ética profesional. Es fundamental que se garanticen los derechos de la persona en todo momento, cuanto más en aquellos en los cuales el usuario se halla desvalido e indefenso para defender su propia dignidad. Son tiempos de cambio que fructifican con la publicación de numerosas guias y protocolos que intentan regularizar el uso de contenciones.
Actualmente surgen nuevas fórmulas asistenciales centradas en el paciente que desplazan el uso de las sujeciones y el mito de “sujetamos para proteger” por el de “protegemos para no sujetar”. El objetivo es garantizar la calidad de vida, la seguridad, la autoestima y la dignidad de las personas a las que atendemos mediante su protección.
Objetivos:
Instruir y promover una actitud a favor de evitar las sujeciones, sobre la base del conocimiento del impacto de las mismas sobre las personas mayores y dependientes, y sobre la base del conocimiento de las alternativas, y los problemas relacionados.
Instruir y promover una actitud a favor de evitar las sujeciones, sobre la base del conocimiento del impacto de las mismas sobre las personas mayores y dependientes, y sobre la base del conocimiento de las alternativas, y los problemas relacionados.
Dirigido a:
- El curso va dirigido a todos aquellos profesionales implicados en el proceso: dirección, equipo médico, equipo de enfermería, gerocultores, trabajadores sociales, terapeutas, fisioterapuetas, psicólogos y auxiliares.
- Titulados universitarios y estudiantes de últimos cursos universitarios relacionados con la rama de ciencias sociales y similares: psicología, pedagogía, trabajo social, educación social, sociología, etc. que quieran mejorar su perfil profesional y sus posibilidades de acceso a la oferta laboral en el sector de los servicios sociosanitarios, públicos o privados.