Si existe algo de lo que no se le enseña lo suficiente a los profesionales de la salud, es sobre la comunicación con los pacientes. Después de todo, estos profesionales centran todo su enfoque en aprender sobre medicinas, técnicas de cuidado para discapacidades y condiciones específicas, habilidades técnicas y mucho estudio. Por lo tanto, un tema como la comunicación queda en segundo plano. Sin embargo, esto no significa que no sea importante e incluso crucial.
Lo cierto es que a los profesionales en el mundo de la salud si reciben cierta información sobre la comunicación con los pacientes. Se les enseña que es necesario ser empáticos, que hay que usar palabras adecuadas y también muy pacientes. Sin embargo, no todos han desarrollado esta habilidad para adaptarla a condiciones o situaciones específicas; además de que tampoco se indica como responder ante ciertas reacciones. Esto puede tener una gran repercusión.
¿En qué consiste la comunicación con los pacientes?
Cuando pensamos en comunicación, lo primero que se nos viene a la mente es una conversación con otra persona. En estos intercambios, suelen estar presentes diferentes habilidades aprendidas naturalmente como lo son las normas sociales y la expresión de ideas. Sin embargo, cuando se trata de la comunicación con los pacientes; este intercambio debe considerar muchos otros elementos que pueden ayudar de forma positiva a la mejora de las relaciones.
De hecho, la comunicación con los pacientes y usuarios muy pocas veces se da de manera natural. Un profesional que valore este aspecto de la relación con sus pacientes; comprende que la misma debe ir acompañada de una estrategia y un estilo de comunicación, que muchas veces incluye la asertividad como su elemento principal.
Con la asertividad, se consigue comunicar una idea, un mensaje de forma clara, ya sea a un paciente o usuario. Este es el elemento principal de la comunicación madura, en la cual no se busca agredir verbalmente; pero tampoco se da espacio para ir a merced de otras personas. Con esto se consigue una comunicación clara, equilibrada y consciente de lo que se busca expresar.
Cuando hablamos con asertividad, expresamos confianza; consiguiendo así mantener al margen el estrés, la ansiedad, la culpa o la rabia. Esta se consigue bajo una gestión correcta de los pensamientos y de la manera en que nos comunicamos. Cuando se tiene una comunicación asertiva, se evitan muchos problemas; tales como malinterpretaciones de información o incluso discusiones verbales.
¿Por qué es importante tener una buena comunicación?
En muchas ocasiones, la comunicación con los pacientes y con los usuarios puede definir el resultado de un tratamiento, de una interacción o de una noticia. Dependiendo de la manera en que nos comunicamos, podemos recibir respuestas positivas o negativas. Contar con una buena técnica, para ello nos permite tener un mejor manejo de lo que sucede durante estas interacciones, permitiendo conseguir resultados y objetivos de manera más rápida.
Además, una buena comunicación con los pacientes y usuarios también afecta en gran medida el desarrollo de la relación. Aunque se trate de una relación laboral, es necesario llevarla por un buen camino para así conseguir alcanzar objetivos de manera eficiente y obtener un alto nivel de confianza. Esta última es crucial en muchas situaciones y aspectos del mundo de la salud, ya que ponemos nuestras vidas y nuestro bienestar en manos de personas ajenas a nosotros.
Curso para desarrollar tus habilidades
La mejor manera de mejorar la comunicación con los pacientes es a través de la preparación y formación adecuada. Para ello puedes probar a hacer un curso de mejora de la comunicación con pacientes y usuarios. En el mismo te busca enseñar a profesionales y cuidadores las mejores técnicas de expresión de ideas para conseguir un buen resultado comunicativo con diferentes personas.
Esto puede tener muchos beneficios, aparte de mejorar la comunicación con los pacientes, como mejores resultados en tratamientos; mejor control de situaciones difíciles y de crisis y un aumento de confianza en la relación con todos los involucrados en el proceso.