La higiene postural es un aspecto que, sin duda alguna, todas las personas descuidamos hoy en día. Desde la aparición de ordenadores y dispositivos móviles, se ha vuelto un problema general en la sociedad y que puede llegar afectar tanto nuestra vida laboral como personal. De hecho, una mala postura puede tener consecuencias incluso en nuestra salud y en nuestra calidad de vida a largo plazo.

Aunque puede que no puedas observar sus efectos negativos de manera obvia e inmediata, mantener una buena higiene postural es más importante de lo que creemos. En este artículo te explicamos por qué es importante conocer las técnicas para una buena postura y los efectos positivos que aporta a tu vida diaria y a tu rendimiento laboral.

 

La higiene postural se trata de una serie de técnicas y recomendaciones que tienen como objetivo mantener una posición correcta de nuestro cuerpo. El enfoque es ayudar al individuo a conseguir nuevos hábitos que eviten posibles lesiones y daños en el área de la columna, el cuello y la espalda en general. Estas técnicas se pueden aplicar tanto en el trabajo como en las tareas de vida cotidiana.

 

Muchas personas consideran que la higiene postural no es tan importante. Después de todo, es tan simple como mantener la espalda derecha y no encorvarse ¿No? En realidad, es mucho más que eso. En la actualidad, existen muchas tareas que realizamos de manera automática o que también consumen toda nuestra concentración. Esto nos lleva a adoptar una mala postura sin siquiera darnos cuenta, dañando la salud de nuestra espalda.

Conocer sobre la higiene postural no solo nos ayuda a evitar las malas posturas cuando realizamos actividades que requieren de concentración o cuando no nos damos cuenta. También nos ayuda a saber cómo debemos posicionar nuestra espalda cuando realizamos diferentes actividades diarias, como lo es dormir, usar el móvil, cargar peso o sentarse frente a un ordenador para trabajar.

Aplicando las recomendaciones de higiene postural ayudará a evitar dolores y molestias tanto a corto como largo plazo; llegando incluso a eliminar el riesgo de deformaciones en la espalda o lesiones incapacitantes.

 

Ahora que conocemos sobre en qué consiste y la importancia de la higiene postural, es necesario que te informes sobre sus beneficios. Esto te ayudará a reunir un poco más de motivación para aprender sobre las técnicas correctas para tener una buena postura en todo momento, que te salga de manera natural y sin esfuerzo.

 

Puede que aún no solo sepas, pero es posible que ese dolor de cabeza se deba a una mala postura. La columna vertebral es la base y pilar de todo nuestro cuerpo; afecta nuestro equilibrio y también nos permite movernos. Es por eso que cuando no la cuidamos bien, se refleja en todo nuestro cuerpo. Fatiga, dificultad para concentrarse, dolores musculares y cansancio son algunos de los síntomas que podrás evitar con una buena higiene postural.

 

Cuando tenemos alguna molestia o dolor, hacer las tareas del trabajo se vuelve un verdadero reto. Nos cansamos mucho más rápido, nos distraemos fácilmente y esto lleva a disminuir el rendimiento. Una buena higiene postural te ayudará a mejorar todos estos aspectos; sobre todo si trabajas largas horas y sentado frente a un ordenador.

 

Una buena postura es el equivalente de sentirse mejor y verse mejor. Generalmente, cuando tenemos una buena higiene postural, nos vemos más atractivos, seguro de nosotros mismos e irradiamos energía positiva y profesional. Todo esto contribuye a que nuestra autoestima también aumente y la imagen que tenemos sobre nosotros mismos cambie para bien.

 

Puede que ahora una mala postura no parezca tan importante; sin embargo, cuando seas mayor y se empiece a reflejar en la curvatura de tus huesos, desearás haberle prestado atención mucho antes. En edades más avanzadas, las deformaciones por una mala higiene postural se hacen notar de manera bastante fácil, y muchas veces pueden impedirnos llevar una vida normal. Evita que esto se vuelva tu problema aprendiendo sobre higiene postural.

 

Cuando nuestra columna se curva en ángulos antinaturales, puede causar una mayor presión en el corazón, dificultar la respiración y también apoyar todo el peso en nuestro cuello. Todo esto lleva al desarrollo de enfermedades relacionadas con estas áreas del cuerpo, lo que se puede evitar con una buena higiene postural.