En España, al menos un 9% de la población actual padece un trastorno mental, y alrededor del 15% lo padecerá a lo largo de su vida; aumentándose estas cifras en el futuro. Es por ello que hay que prestar una mayor atención a este problema que en la mayoría de los casos comienza durante la infancia y la adolescencia.
No existe una definición concreta para explicar los trastornos mentales, aunque si que podemos decir que lo padecen “personas que sufren trastornos psiquiátricos graves que cursan con alteraciones mentales de duración prolongada, que conllevan un grado variable de discapacidad y de disfunción social, y que han de ser atendidas mediante diversos recursos socio sanitarios de la red de atención psiquiátrica y social”. Según expone el Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos (NIMH) en 1987.
Conociendo ya el significado y la importancia de los trastornos mentales en nuestra sociedad, vamos a conocer aquellos trastornos mentales que se dan habitualmente en edades tempranas.
Retaso mental
Cuando se habla de retraso mental, se hace referencia a una capacidad intelectual significativamente inferior al promedio (CI<70). Este trastorno se inicia antes de los 18 años y produce grandes dificultades de adaptación al medio.
Según la capacidad del coeficiente intelectual de la persona afectada nos encontraremos con retraso mental leve (CI entre 50 y 70), retraso mental moderado (CI entre 35 y 50), retraso mental grave (CI entre 20 y 35) y retraso mental profundo (CI<20).
Trastornos generalizados del desarrollo
Son estados caracterizados por déficits masivos en diferentes áreas del funcionamiento, que conducen a un deterioro generalizado del proceso evolutivo. Muchos de ellos además, están afectados de retraso mental, y su tratamiento requiere una rehabilitación a largo plazo orientada evolutivamente de una forma multimodal
Trastornos de la eliminación
Dentro de este tipo de trastornos podemos encontrarnos con:
- Enuresis: Que es una alteración del aprendizaje del control del esfínter vesical, que se manifiesta como la emisión de orina durante el día o la noche de forma repetida e involuntaria.
- Encopresis: Similar concepto a la enuresis (en este caso refiriéndose al control del esfínter anal).
Trastornos por tics
Los tics son respuestas motoras (musculares) o vocales (fónicas), breves, repetitivas y arrítmicas que no tienen ningún sentido, aunque pueda parecerlo. Implican movimientos recurrentes del mismo grupo de músculos, pero su localización puede variar gradualmente con el tiempo.
Existen varios tipos de trastornos por tics como por ejemplo el tic transitorio o el trastorno de la Tourette.
Trastorno por déficit de atención e hiperactividad de la infancia
Este es el más frecuente de los trastornos del neurodesarrollo infantil. Los síntomas incluyen dificultad para concentrarse y prestar atención, dificultad para controlar la conducta e hiperactividad (actividad excesiva).
Trastornos afectivos y por ansiedad propios de la infancia
Este tipo de trastornos hace al paciente sentirse inseguro e incapaz de afrontar los retos que se presentan en su vida. Los trastornos básicos son la ansiedad y la depresión, con sus modalidades y variedades.
En los niños podemos encontrarnos con tres tipos: mutismo selectivo, trastorno de ansiedad por separación y trastornos afectivos.
Como vemos, existen diversos tipos de trastornos mentales en las épocas de la infancia y la adolescencia que es importante conocer para así saber cómo tratar y ayudar a estos niños que, como hemos indicado al principio del artículo, ocupan un alto porcentaje de la población actual.