Respiraciones profundas
Las respiraciones profundas son una de las técnicas de relajación para el control del estrés que a muchas personas les funcionan muy bien. Se trata, simplemente, de aprender a respirar y podemos hacer respiraciones profundas en cualquier momento, ya que no necesitaremos demasiado tiempo para liberarnos del estrés.
Esta primera de las técnicas de relajación para el control del estrés la podemos hacer tumbados bocarriba o sentados. Colocaremos una mano sobre nuestro estómago y otra sobre el corazón. Inhalaremos contando hasta diez, mientras notamos cómo nuestra barriga se va llenando.
Tras haber hecho esto, contaremos hasta dos aguantando la respiración y exhalaremos volviendo a contar hasta diez. Si hacemos esta primera de las técnicas de relajación para el control del estrés unas cinco veces, o las que nos hagan falta, nos sentiremos más tranquilos. Le habremos hecho frente al estrés.
Meditación
La meditación es otra de las técnicas de relajación para el control del estrés que puede incluir la práctica anterior. Pues, el control de la respiración es muy importante. Sin embargo, la meditación va más allá. Nos ayuda a centrarnos en el momento presente, evitando preocuparnos por el pasado o el futuro, grandes aliados del estrés.
Esta segunda de las técnicas de relajación para el control del estrés nos ayuda a corregir nuestra postura corporal, estar a gusto en silencio, relajar nuestra musculatura, limitar los pensamientos obsesivos y, en definitiva, sentirnos mejor. Las personas que meditan notan cambios muy positivos en su vida.
Por esta razón, en nuestro curso descubrirás que esta segunda de las técnicas de relajación para el control del estrés debes practicarla a diario. Empieza meditando apenas 2 minutos. Al cabo de unas semanas ya serán 5. Poco a poco, irás adquiriendo una mayor experiencia y sintiéndote mejor. Una práctica transformadora.
Yoga
Una última de las técnicas de relajación para el control del estrés que queremos mencionarte es el yoga. Definitivamente, en el yoga también podemos encontrarnos con espacios para la meditación y para el control de la respiración. De hecho, notaremos la diferencia al realizar algunas posturas teniendo un pleno control de la respiración.
Lo positivo del yoga es que es una de las técnicas de relajación para el control del estrés que nos permite movernos. Esto nos ayudará a liberar el estrés, mientras tonificamos nuestro cuerpo y trabajamos la flexibilidad. Sin duda, una práctica que en los últimos años ha tenido mucho éxito, ya que es una forma de hacer ejercicio físico moderado, apto para todas las personas y que nos ayuda a gestionar el estrés.
En el curso de ISES Instituto encontraremos otras técnicas de relajación para el control del estrés muy interesantes. Sin embargo, estas son algunas que vamos a aprender y que será importante que pongamos en práctica diariamente para que podamos ver sus beneficios. De esta manera, también, se convertirán en una parte más de nuestros hábitos diarios que supondrán un antes y un después en el manejo de nuestro estrés.
Si lo normalizamos y no utilizamos estas técnicas de relajación para el control del estrés, este puede terminar teniendo un impacto muy importante y nocivo en nuestro bienestar. Además, el hecho de no ponerle solución puede provocarnos ansiedad y problemas para dormir. ¿A qué esperamos para hacer este curso?