La depresión es un síndrome (conjunto de síntomas) que pueden causar discapacidad. Se hace cada vez mas necesario la existencia de profesionales que conozcan y se especialicen en el tratamiento de este trastorno. En muchas ocasiones el diagnóstico equivocado puede empeorar el síndrome. Por ello, ante este panorama es necesario reforzar la formación sanitaria.

Cuando se sufre depresión nos encontramos en un estado de ánimo que en principio es una respuesta natural ante una situación dolorosa y que produce una reacción negativa de tristeza en nosotros. Cuando esta situación se alarga y no se supera pueden aparecer síntomas como la falta de energía, irregularidad del sueño y trastornos del apetito. También nuestra capacidad cognitiva y nuestro vida psíquica se ve afectada.

En este punto empiezan a aparecer problemas de autoestima, pensamientos recurrentes no productivos y aislamiento social. Por ello es tan importante tener una red de personas cercanas que nos ayuden a combatir estos síntomas que empiezan a entrar en el terreno afectivo, y en los cuales está la clave para salir de la depresión.

Los amigos son pieza clave para la superación de una depresión sobre todo por un aspecto bastante importante: nos conocen muy bien. Durante el proceso de depresión se suele producir distorsiones sobre la manera de percibirnos a nosotros mismos y al mundo que nos rodea. El mundo es algo demasiado hostil como para enfrentarnos a ello.

Los amigos son aquellas personas que nos recuerdan quiénes somos. Recibir el cariño de alguien que te quiere tal y como eres refuerza la confianza en nosotros mismos. Te recuerdan que la depresión que sufres es un estado que pasará y, lo mas importante, que ellos te ayudarán a superar el trance.

 

También es importante tener amigo que te ayuden a evitar el aislamiento social. La falta de energía hace que pases mucho tiempo en la cama, o bien, los pensamientos repetitivos no te permitirán disfrutar de nada. Los amigos son buenos actores para sacarte de ese bucle. Algo que rompa la mecánica cíclica de la depresión siempre es muy recomendable. Esto ayudará a administrar tu energía y a ir recuperándola.

En ocasiones la parte afectiva necesaria para superar la depresión no es bien recibida cuando proviene de nuestros familiares. Bien porque justo sea la causa emocional de nuestro trastorno o porque conocen poco nuestra dinámica vital. En este caso, el papel de los amigos cobra más importancia porque sus cuidados pueden llegar a convertirlos en acompañantes terapéuticos del proceso depresivo.

Lo bueno de contar con los amigos es que también cuentan con la suficiente distancia emocional como para promover conductas positivas que nos ayuden a superar la depresión, sin verse especialmente afectado por toda la carga que puede implicar. La amistad se suele asociar con lo lúdico y el ocio. De hecho cuando queremos desconectar, lo solemos hacer con nuestros amigos.

Esa capacidad de desconexión se hace fundamental en la depresión para poder enfrentarla desde una perspectiva que no se vea influida por la tristeza constante. La posibilidad de poder disfrutar de lo cotidiano ayuda a conectar con uno mismo y dimensionar la situación que vivimos de manera correcta. Por todo esto, los amigos son las personas perfectas para ayudar a superar una depresión.